Barista de Seúl Crea Obras de Arte de Café
Barista surcoreano Lee Gang-bin utiliza glaseado colorido, una técnica que él llama “arte de crema”, para crear obras maestras en cada taza de café
El barista surcoreano es famoso por sus creaciones artísticas que él hace en cada taza de café que vende. Sus creaciones le han dejado casi 200,000 seguidores de Instagram.
“El café es un cuento de hadas para mí,” le dice a CNN. “Me ayuda a expresar exactamente lo que quiero y trae mis sueños a la realidad. La gente que se especializa en arte latte usualmente usa dos colores: blanco y negro. Pero yo quería romper el límite de color.”
Aunque las creaciones que pueden ser vistas en sus tazas de café son famosas obras maestras creadas por artistas con Van Gogh y Edvard Munch, él también hace trabajos personalizados para los clientes.
Él ha recibido peticiones de todo tipo. Desde personajes de cuentos, como el Principito a una portada de revista de Vogue Corea. Sin embargo, sin importar el diseño, Lee dice que es importante que sus obras de arte también puedan ser consumidas, no solo admiradas.
“Es mi regla no hacer un café que la gente no pueda beber,” él dice. “Solo hago arte de crema en café frío. Si lo hago en café caliente, el sabor cambia al enfriarse y no quiero que el sabor del café cambie.”
El costo de cada arte de crema es 7,500 won ($6.63). Podría sonar costoso, pero una taza podría tomar hasta una hora en hacerse y el solo hace tres al día, por reservación.
Sin embargo, el oso de peluche de arte de crema representa una excepción, porque puede ser hecho en solo 40 segundos.
“Somos baristas haciendo café, no solo artistas dibujando imágenes en café,” él dice.
Lee ha estado haciendo café por 10 años. “He aprendido sobre café desde que tenía 18 años,” él dice. “En ese momento, los baristas no eran reconocidos en Corea así que estaba algo preocupado. Pronto, esta preocupación desapareció al interesarme en el trabajo.”
Además, él dice que ha recibido mucho apoyo de sus padres.
“La gente a mi alrededor fueron críticos sobre mi convirtiéndome en un “chico de café”,” dice Lee. “Pero me mantuve firme con mi decisión, como muchos coreanos. Quería mostrar que podría volverse exitoso con café.”
Hoy, su café está tan ocupado que solo obtiene un par de horas de descanso en una noche. La clave al éxito, él dice, es la pasión y perseverancia.